Bour-Tolán (compendio de testimonios reptilianos)
15,68 € 16,50 €
Idioma: Español
Páginas: 286
Encuadernación: Rústica
¿Qué es Bour-Tolán? Verás, Bour-Tolán, en sus días de gloria, fue la principal metrópolis de la civilización reptiliana, aunque ni de lejos el único núcleo subterráneo habitado...
¿Qué es Bour-Tolán? Verás, Bour-Tolán, en sus días de gloria, fue la principal metrópolis de la civilización reptiliana, aunque ni de lejos el único núcleo subterráneo habitado...
La Criptóloga, una figura esquiva y relevante del panorama ocultista europeo que ha pasado los últimos tiempos recopilando febrilmente testimonios sobre reptilianos, se encuentra ahora con la misión definitiva entre manos: salvar a esa raza reptiloide que ostenta el poder global en secreto. Una epidemia los está poniendo en peligro, pero por su tradición clandestina se niegan a aceptar ayuda o recibir a nadie del mundo exterior. Para llevar a cabo este cometido, la Criptóloga cuenta con su equipo, una patulea de desperdicios humanos que la ayudarán —o no— a alcanzar Bour-Tolán, la legendaria ciudad reptiliana donde dormita una descomunal bestia enferma… una bestia cuyos estertores proyectan a la atmósfera, a través del laberinto de galerías conectadas con la superficie, la cepa que diezma a los reptilianos del planeta. Pero este camino no será fácil, pues, por desgracia, tendrá que enfrentarse a muchas… gilipolleces.
Índice
Introducción: La hora de los señores reptiles, por Oscar Mariscal
Testimonio 128: Diego Cabrera, por Isabel Galán
Testimonio 194: Michi (nombre completo desconocido), por Alberto Berjón
Testimonio 247: Gaspar Itúrbide, por Rubén Fonseca
Testimonio 260: Flora Cuesta Aguilar, por Ana Nieto Morillo
Testimonio 319: Juan Jesús Gómez, por Luis Alberto Martín
Testimonio 369: Enrique Ronquillo Jiménez, por Francisco Guerrero
Testimonio 394: Gutiérrez, por Ander Mombiela
Caravana Dragón, por Álvaro Aparicio, que incluye:
- Prólogo: idiotas en llamas
- Subsuelos
- Cañón de mano
- Palo y a la bolsa
- Cascársela así
- Indonesian Drift
- Cuatro escenas del drama que representa estar vivo
- Nuestro amigo Juancho
- Al menos hay un mapa